Cayetano Rivera, más sincero que nunca: "Tuve que pedir un préstamo de 60.000 euros para poder ser torero"

Mientras su mujer Eva González capitaneaba ‘Masterchef’ en TVE, Cayetano Rivera se convertía en su ‘competencia’ durante la entrevista que Jesús Calleja le ha realizado en su programa de Cuatro, ‘Planeta Calleja’. Enamorados y felizmente casados, pero ‘rivales’ televisivos. De hecho, Eva González comentaba ‘celosa’ en Twitter durante la emisión del espacio de Cuatro: «Me dijo Cayetano que conmigo iría al fin del mundo y resulta que con quien se ha ido es con Jesús Calleja».  El torero ha ‘desnudado’ su alma en el programa de aventuras, dejando al aire sus confesiones más inéditas e íntimas. Teniendo en cuenta que siempre ha mostrado una especial ‘timidez’ por dejarse escarbar en su intimidad, el Cayetano Rivera que se ha mostrado este domingo ha sorprendido sobremanera. De su mala relación con su hermano Julián Contreras, de sus ‘apuros económicos’ cuando quiso ser torero, de la muerte de su padre ‘Paquirri’, de lo que tiene que reprochar a Isabel Pantoja y de lo que significa Eva González en su vida. De todo ha hablado y nada ha omitido. Cayetano, en su versión más desenfadada en ‘Planeta Calleja’.

Los comienzos nunca son fáciles y más si no se dispone de una presupuesta holgada situación económica, como es el caso de Cayetano Rivera. El hecho de ser hijo de unos padres famosos no lo puso, precisamente, en una situación de privilegio. Este extremo, junto a los problemas con la herencia de su padre y su gran sentido del orgullo, hicieron que el diestro tuviera que pedir ayuda económica para conseguir su sueño de ser torero. «De la herencia de mi padre, por la gestión de mi abuelo, no llegué a ver nada. No es que no heredase, es que la herencia no generó beneficios. Las fincas se lo comieron todo. Y como quise ser torero, tuvo que pedir un crédito, como muchos españoles. Solicité 60.000 euros», ha asegurado el hermano de Francisco Rivera en ‘Planeta Calleja’.

Probablemente, hubiera sido más fácil pedir el dinero a la familia, pero Cayetano siempre ha querido labrarse su carrera sin favoritismo alguno: «Hubo gente a la que podría habérselo pedido, pero no quise, en ese sentido soy muy orgulloso. Está claro que venir de una familia torera, ayuda, no lo voy a negar, pero siempre quise ganarme las cosas por mí mismo». Como prueba, un botón: en sus carteles promocionales solo se publicita «Cayetano», sin ‘empujón’ delante o trasero.

De su hermano Julián Contreras: «No por ser familia hay que llevarse bien»

Cayetano Rivera tiene tres hermanos, pero no con todos ellos conserva la misma relación. Con el que más afinidad y cariño mantiene es con Francisco Rivera, sintonía que no siente con Julián Contreras: «Ahora no tenemos relación, es una pena porque siempre me he llevado bien con él, pero estamos distanciados. No por ser familia estamos obligados a llevarnos bien, tenemos que ser consecuentes y responsables de nuestros actos». Con el que sí ha protagonizado Cayetano un acercamiento es con su hermano Kiko Rivera, el hijo de Isabel Pantoja: «Nunca nos hemos llevado mal, pero no teníamos relación por las diferencias entre nuestras madres. A raíz de la boda de Francisco y Eugenia (Martínez de Irujo) nuestra relación mejoró bastante».

Los objetos personales que reclama a Isabel Pantoja

Cayetano y Francisco todavía no tienen en su haber lo que estiman que les pertenece. El hecho de que la tonadillera se niegue a entregarles los objetos personales que pertenecieron a Paquirri y que éste les dejó en herencia, ha ido minando una relación que, si nunca fue buena, tres décadas después de la trágica muerte del diestro, es inexistente y los sitúa en bandos enemigos. «Hubo una repartición de efectos personales de mi padre, acordada por todas las partes, y que nunca se llegó a hacer efectiva. Capotes, muletas, trajes de torear… Isabel Pantoja se ha retrasado un poco, 32 años en concreto», ha bromeado el diestro con Jesús Calleja. Pese a las tiranteces que esto ocasionó, Rivera razona que aquello tuvo que deberse a las fuertes tensiones que existían entre Isabel y su madre, Carmina Ordóñez. Eso sí, subraya que ellos solo piden lo que les pertenece.

La muerte de ‘Paquirri’, tema escabroso para Cayetano

El torero tiene bastantes recuerdos de su infancia en la finca familiar y en el campo: «Tuvimos una infancia fantástica, estábamos asalvajados mi hermano y yo. Montábamos a caballo, en moto. Recuerdo que mi padre me obligó a montar a caballo cuando yo tenía 3 años». De su muerte, cuando él solo tenía 7 años, prefiere no hablar. Es un aciago recuerdo que prefiere no evocar. Fue su madre, Carmina, quien les comunicó a él y a Francisco la desaparición de su padre: «Vino mi madre a decirnos que nuestro padre se había ido al cielo. En ese momento, lloramos los dos. Al ser personajes públicos, recuerdo que hubo quien se alegró de la muerte de mi padre. De hecho, un día atendí una llamada a casa de una persona que nos dijo que se alegraba de su muerte».

Su gran amor por Eva González: «He encontrado a la persona que necesito»

Cayetano se ha sincerado sobre los sentimientos que siente hacia su mujer, la presentadora Eva González. Aunque desde el primer día que la vio se quedó arrobado, entendió también que debían confluir otros factores determinantes: «Hubo un flechazo, pero supo que teníamos que conocernos y tenían que darse una serie de condicionantes y luego se dieron. He encontrado a la persona que necesito».

Eva sufre con cada corrida de Cayetano: «Antes sí me acompañaba a la plaza cuando no era consciente del todo del peligro, pero ahora se queda en el hotel pegada al móvil para que tras cada toro mi mozo de espadas le mande un mensaje tranquilizador». El torero ha recalcado que su mujer nunca le ha pedido que abandone los toros:  «Lo que sí me ha pedido es que el tiempo que esté lo dedique al toro al cien por cien porque sabe que cuanto más metido esté menos peligro corro».